Imagina la felicidad y sencillamente ésta llega a tí. Imagina una sonrisa y ésta te hara reir (LIBRE)

Me encontraba en la sala comun de Ravenclaw, era extraño, por que no había nadie, así que me senté en uno de los lugares sercanos al fuego, no es que hiciera mucho frío en el ambiente, pero yo sentia escalofrios en mi espalda.
En esos momentos me hayaba confundida, bien decian que el pasado forma a las personas, que es lo que te ayuda a saber como eres, pero.. que pasa si no tienes pasado?, o no lo recuerdas?, ahora sólo me quedaba mi imaginación........ tuve una buena infancia?, fuí feliz?, pues eso quiero creer. Tengo un recuerdo o mejor dicho un sueño, algo que yo misma me formé en mi mente, pero que lo pensé tantas veces que ahora lo siento como si en verdad formara parte de mi pasado.

Estoy yo, en un parque, debo tener unos 7 años, luego aparece otra figura, es mi padre, quiene está sentado en una banca, yo llego hasta donde está mi papá y le muestro una flor que está cerrada, pero luego la miro unos momentos y se abre como por arte de magia, sí, en efecto, magia, mi padre se emociona y le llama a mi mamá, quien llega pero yo no logro ver su rostro, solo se que ella se sorprende, ya que es la primera vez que hago magia......

Hasta ahí llega mi imaginación, no logro ver la el rostro de mi madre, no puedo formar ni una sola imagen de el, mi padre la describia, ya que no tenian niguna foto de ella, pero a veces una imagen vale más que mil palabras, pero por ahora solo me quedaba mi imaginación, podia imaginar la felicidad y que esta llegara a mi, imaginarme sonriendo de pequeña y ese mismo sueño me haria sonreir. Así que lo hice y de un momento a otro me hayé sonriendole a la nada.

Algo interrumpio mis pensamientos, ya que alguien entró de súbito a la sala comun, provocando que yo pegara un pequeño brinquito.

Pff!. Aburrido, así me sentia en estos momentos, no me gustaba sentirme así, me desesperaba, de algun modo tenia que entretenerme con algo.
Resolví el acertijo para entrar a la sala común y entré. Sólo había una chica, que estaba sentada serca del fuego, lo cual me pareció extraño, ya que no hacia mucho frio. Al no tener muchos conocidos en mi casa decidí asercarmele, para poder conocer a otra persona más.
- Hola - le dije con una sonrisa, mientras me sentaba al lado de su lugar. Aquella chica era algo bajita, aunque tal vez yo era alto, pero a pesar de ello no tenia la apariencia de estar en 3º como yo.
La observé bien, detenidamente, era una chica bastante guapa, su cabello castaño era no muy común, su rostro blanco y sus ojos eran muy intensos, de un azul propio del mar o del cielo, tenia una aire inocencia a mi parecer. - Me llamo Daniel - le dije aún sonriendo. Me sentia como un tonto por verla así, tan detenidamente, ya me imaginaba mi rostro embobado, era verdaderamente torpe en el sentido del amor y más aún con las chicas lindas como esta. Miré hacia el fuego, esperando a que dijera su nombre.

La persona responsable de interrumpir mis pensamientos había sido un chico, bastanet alto debia decir, pero con una cara muy angelical, como la de un niño pequeño, podria apostar que tenia unos 13 años.
- Hola - le contesté su saludo con una sonrisa. Él se sentó junto a mi, presentandose, hubo un breve silencio y él me miró, me parecia un poco extraño, pero intenté evadir su mirada para evitar sentirme incomoda. - Mucho gusto Dani. Yo me llamo Juliet - le dije mirandolo, aunque él ahora estaba viendo el fuego. Tenia el aspecto de un niño pequeño y me resultaba tierno en cierta manera.

Ella me devolvió el saludo con una sonrisa, una sonrisa digna de un ángel, que provocó que su rostro se iluminara.
"Mucho gusto Dani" me dijo y me gustó como sonó mi nombre saliendo de sus labios.y luego ella misma dijo su nombre: "Juliet", como el de Romeo and Juliet, de Shakespiere.
- También es un placer - le dije sonriendo - Bueno Juls - le dije en forma de apodo, esperando que no le molestara la confianza con que le hablaba - en que año vas? - si iba en tercero o al menos en cuarto podria tener posibilidades con ella, pero si era de quinto, sexto o séptimo estaba fuera de mi alcance.

Sonreí cuando escuché el diminutivo, me parecia familiar que alguien me llamara así, tal vez fue mi madre, cuando vivia, pero yo no lo podia recordar, eso me causaba desperación e importencia, era horrible, pero este no era el lugar ni el momento para desahogarme, mucho menos con Danny, que apenas acababa de conocer.
- En quinto - le dije con una sonrisa, un poco fingida y una mirada ausente, tratando de hacer que mi mente volviara con Danny y dejar de pensar en eso, ya tendria tiempo yo de estar sola y enojarme conmigo mismam, por ahora no queria parecer antipática, ni mucho menos crearme enemigos, ese chico parecia bastante agradable. - ¿y tú? - le pregunté para seguir con la platica.

La chica parecia como desconectada, posiblemente seria mi imaginación, pero podia apostar a que la ví con el rabillo del ojo cuando fruncia un poco el ceño, como si estuviera pensando en algo frustante.
Quinto año!, estaba fuera de mi alcance, pero podria ser mi amiga y tal vez, dentro de unos años podria tener una posibilidad.
Llevé la mano hacia mi cabello, desordenandolo levemente, era una mania, eso hacia cuando estaba con una chica que me gustaba, pero por supuesto eso no lo sabia nadie más que Alex.
- Yo estoy en tercero - le dije sonriendo- y qué hacias aqui antes de que yo te interrumpiera?

Yo era mayor que él por dos años aproximadamente, vaya, era una diferencia considerable, pero él comenzaba a agradarme, la diferencia de edades no era ningun obstaculo para la amistad.
Escuché su pregunta, obviamente no iba a decirle que yo estaba intentado recordar mi pasado porque un hechizo había borrado mi memoria, así que sólo respondí...- Estaba... pensando - le dije con una sonrisa pequeña - y a ti que te trae por aqui?

Escuché su respuesta y me extraño un poco que dudara al contestar.
- Pensar, si, eso hacemos todo el tiempo - le dije con una sonrisa, estaba bromeando y esperaba que ella no se molestara por ello - Pues yo estaba muy aburrido y buscaba con quien hablar y te encontré a ti - le dije aún sonriendo, sentia que ella era un poco callada, pero me agradaba y seguramente nos llevariamos bien como buenos Ravens que eramos.- y en que pensabas?, si puedo saber - queria seguir hablando, no era de estar callado y esperaba que ella quieciera compartir en lo que pensaba, sino pues ya hablariamos de otra cosa o saldriamos a dar un paseo.